Un post que se había quedado olvidado sin quere en el disco duro.
Siguiendo la serie con fotografía nocturna.
En este caso, optamos por bajar a la costa y probar la fotografía nocturna con Luna.
Es una experiencia diferente a la anterior (Mi primera Via Lactea)
En este caso, utilizamos largas exposiciones con el ISO más bajo y, por supuesto, el diafragma más abierto. Así resultaban exposiciones de 4-6 minutos.
Como en la anterior ocasión, la excursión la hice en compañía de unos amigos, que sólo es muy aburrido y arriesgado.
Voy a explicar un poco como es el proceso.
Una vez situado en la escena y buscado el encuadre (ante la escasa luz nos podemos ayudar de una potente linterna), tenemos que determinar 3 cosas:
- Enfoque,
- Balance de blancos, y
- Exposición: tiempo y diafragma.
Sobre el primer punto diré que es difícil enfocar de noche ante la escasa luz. Es muy probable que el AF no funcione y, aunque nos podemos ayudar de una linterna o un laser para enfocar, lo mejor es recurrir a la hiperfocal.
También para tener una buena profundidad de campo no es necesario cerrar el diafragma a f/8 o f/11 como en paisajes diurnos que extendería la exposición a límites poco razonables (horas).
La hiperfocal es la distancia mínima donde se maximiza el enfoque, de manera que tengamos la máxima cantidad de escena enfocada, desde el primer plano hasta el infinito. Para ello tenemos que conocer 3 cosas: tamaño del sensor de nuestra cámara, focal del objetivo y diafragma a utilizar.
En el tamaño de sensor tenemos principalmente el formato 4/3, el APS-C y el formato completo.
Como ese el el factor que no cambiaremos, a no ser que tengamos varias cámaras, ya podemos encontrar en internet o mediante aplicaciones tanto para PC como smartphones la hiperfocal. Os pongo aqui los modelos utilizados por Mario Rubio, un prestigioso fotógrafo nocturno.
Tablas de hiperfocales
En segundo lugar, una vez determinado el enfoque tenemos que decidir el balance de blancos. Aqui es aconsejable no utilizar el balance de blancos automáticos y luego corregir en la edición, sobre todo si queremos aportar iluminación a la escena. Lo mejor es utilizar la escala de grados Kelvin de la cámara, o bien, los modelos prefijados (incandescente, tungsteno, luz de día,...).
Seleccionaremos un balance de blancos entre 2500 y 4000 grados Kelvin para obtener tonalidades frías, en torno al azul (si nuestra cámara no nos permite seleccionar numéricamente el Balance de Blanco, podemos conseguir el
mismo efecto seleccionado modo “Tungsteno incandescente”).
Al contrario, seleccionaremos un balance de blanco mayor de 4000 Kelvin para obtener tonalidades cálidas, es decir tonos naranjas (o "Luz de día" si nuestra cámara no nos permite seleccionar numéricamente el Balance de Blancos),
En tercer lugar, tenemos el cálculo de la exposición. Para no estar haciendo pruebas interminables podemos hacer uso de la reciprocidad para calcular el tiempo de exposición.
Ello implica primero seleccionar un ISO alto (1600, 3200), y un tiempo de partida de, por ejemplo 30 segundos, como punto de partida.
Hacemos una foto con estos ajustes y evaluamos el histrograma (no fiarse del LCD de la cámara), y vamos ajustando el tiempo y la sensibilidad hasta que obtengamos un histograma "correcto".
Pero la foto no la haremos a ese ISO porque en este caso queremos minimizar el ruido y obtener trazas de estrellas. Otro caso sería si queremos que las estrellas aparezcan inmoviles.
Una vez hayas encontrado la exposición correcta para dicho ISO se opera de la siguiente manera:
Si por ejemplo a 1600 de ISO, conseguiste un buen histograma con 30 segundos, para llegar a ISO 100 has de bajar un paso de ISO completo y multiplicar el tiempo por dos quedando como sigue:
ISO 1600-30 segundos > ISO 800-1 minuto > ISO 400-2 minutos > ISO 200-4 minutos > ISO 100-8 minutos
Así tendremos una exposición correcta con 8 minutos ISO 10.
Más información la podeis obtener en la página de Mario Rubio.
Por cierto, en febrero de 2012, imparte un curso en La Palma, ¡no os lo perdais!
Algunas fotografías:
Siguiendo la serie con fotografía nocturna.
En este caso, optamos por bajar a la costa y probar la fotografía nocturna con Luna.
Es una experiencia diferente a la anterior (Mi primera Via Lactea)
En este caso, utilizamos largas exposiciones con el ISO más bajo y, por supuesto, el diafragma más abierto. Así resultaban exposiciones de 4-6 minutos.
Como en la anterior ocasión, la excursión la hice en compañía de unos amigos, que sólo es muy aburrido y arriesgado.
Voy a explicar un poco como es el proceso.
Una vez situado en la escena y buscado el encuadre (ante la escasa luz nos podemos ayudar de una potente linterna), tenemos que determinar 3 cosas:
- Enfoque,
- Balance de blancos, y
- Exposición: tiempo y diafragma.
Sobre el primer punto diré que es difícil enfocar de noche ante la escasa luz. Es muy probable que el AF no funcione y, aunque nos podemos ayudar de una linterna o un laser para enfocar, lo mejor es recurrir a la hiperfocal.
También para tener una buena profundidad de campo no es necesario cerrar el diafragma a f/8 o f/11 como en paisajes diurnos que extendería la exposición a límites poco razonables (horas).
La hiperfocal es la distancia mínima donde se maximiza el enfoque, de manera que tengamos la máxima cantidad de escena enfocada, desde el primer plano hasta el infinito. Para ello tenemos que conocer 3 cosas: tamaño del sensor de nuestra cámara, focal del objetivo y diafragma a utilizar.
En el tamaño de sensor tenemos principalmente el formato 4/3, el APS-C y el formato completo.
Como ese el el factor que no cambiaremos, a no ser que tengamos varias cámaras, ya podemos encontrar en internet o mediante aplicaciones tanto para PC como smartphones la hiperfocal. Os pongo aqui los modelos utilizados por Mario Rubio, un prestigioso fotógrafo nocturno.
Tablas de hiperfocales
En segundo lugar, una vez determinado el enfoque tenemos que decidir el balance de blancos. Aqui es aconsejable no utilizar el balance de blancos automáticos y luego corregir en la edición, sobre todo si queremos aportar iluminación a la escena. Lo mejor es utilizar la escala de grados Kelvin de la cámara, o bien, los modelos prefijados (incandescente, tungsteno, luz de día,...).
Seleccionaremos un balance de blancos entre 2500 y 4000 grados Kelvin para obtener tonalidades frías, en torno al azul (si nuestra cámara no nos permite seleccionar numéricamente el Balance de Blanco, podemos conseguir el
mismo efecto seleccionado modo “Tungsteno incandescente”).
Al contrario, seleccionaremos un balance de blanco mayor de 4000 Kelvin para obtener tonalidades cálidas, es decir tonos naranjas (o "Luz de día" si nuestra cámara no nos permite seleccionar numéricamente el Balance de Blancos),
En tercer lugar, tenemos el cálculo de la exposición. Para no estar haciendo pruebas interminables podemos hacer uso de la reciprocidad para calcular el tiempo de exposición.
Ello implica primero seleccionar un ISO alto (1600, 3200), y un tiempo de partida de, por ejemplo 30 segundos, como punto de partida.
Hacemos una foto con estos ajustes y evaluamos el histrograma (no fiarse del LCD de la cámara), y vamos ajustando el tiempo y la sensibilidad hasta que obtengamos un histograma "correcto".
Pero la foto no la haremos a ese ISO porque en este caso queremos minimizar el ruido y obtener trazas de estrellas. Otro caso sería si queremos que las estrellas aparezcan inmoviles.
Una vez hayas encontrado la exposición correcta para dicho ISO se opera de la siguiente manera:
Si por ejemplo a 1600 de ISO, conseguiste un buen histograma con 30 segundos, para llegar a ISO 100 has de bajar un paso de ISO completo y multiplicar el tiempo por dos quedando como sigue:
ISO 1600-30 segundos > ISO 800-1 minuto > ISO 400-2 minutos > ISO 200-4 minutos > ISO 100-8 minutos
Así tendremos una exposición correcta con 8 minutos ISO 10.
Más información la podeis obtener en la página de Mario Rubio.
Por cierto, en febrero de 2012, imparte un curso en La Palma, ¡no os lo perdais!
Algunas fotografías:
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| En la reserva marina |
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| Meseta Nocturna |
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| Rocas tras La Zamora |
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| Cabeza de niño |
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